jueves, septiembre 30, 2010

El año que viene se cumplen 10 años de egresada de la secundaria y como se estila en la mayoría de los colegios hay una reunión de ex alumnos, en donde después de toda una década, le volveré a ver la cara a mis compañeros.
De aquellos años conservo solo una amiga. No porque yo sea Hannibal Lecter, sino porque caí en el colegio equivocado.
Como fui toda la vida de Villa Del Parque y siempre estaba alejada de la civilización, un poco por comodidad , otro poco por ignorancia, decidí quedarme en el mismo colegio donde había hecho la primaria.
Los dos primeros años funcionaron bien, tenía un grupito de "amigas" con las que hacía cosas típicas de la edad. El problema, es que a medida que uno va definiendo su personalidad aparecen las diferencias. Y en este caso , eran irreconciliables. Yo no escuchaba la misma música que ellas , no me gustaban los mismos programas de tele , ni los mismos chicos , ni la misma ropa , ni compartía sus ideas sobre política , maternidad, religión y la vida misma.
O sea, en el recreo eran todas por un lado y en el aula, comiendo Mogul: YO.
Y como no era la linda del curso, con los varones tampoco tenía mucha suerte.
Allá por el 98, si algún chico se me acercaba , de lo único que podía hablarle era de los hermanos Gallagher y mi fanatismo por Oasis. Y con mis compañeros, que eran como un grupo de monitos adiestrados al grito de HUNGA HUNGA claramente eso no funcionaba.
Encima hacía teatro y teatro en ese colegio era sinónimo de anormalidad. La mayoría pensaba que era lesbiana, o que escondía armas debajo del banco.
De más está decir que no la pasé nada bien esos años. No fui a Bariloche y el último día de clases sentí una especie de liberación espiritual mística dificil de explicar.
Luego la vida me premió con excelentes amigos con los que sí comparto y puedo conectar.
Hace poco, me crucé por la calle con uno de mis compañeros, el "winner" de la clase. El que se levantaba la remera para mostrarnos sus abdominales arduamente trabajados. Al tipo le decían que se parecía a un jugador de fútbol y se había creído el personaje al pie de la letra. Iba a bailar con la camiseta de River y hasta se jactaba de firmar autógrafos.
Me costó reconocerlo no solo porque pesa 120 kilos , sino que está totalmente pelado. Era el primero que me aseguraba que siendo periodista iba a fracasar, a comer pan duro, que mejor estudiara contabilidad o que no estudiara nada , como el, que se iba dedicar a la empresa familiar ( lease un maxikiosco sobre la calle Cuenca).
Charlamos un rato. Se sorprendió bastante cuando le dije que estaba trabajando y con un halo de tristeza me confesó que se había ido a probar a todas las inferiores de cuanto Club de Fútbol hubiera, sin éxito alguno.
Cuando nos estabamos por despedir me pidió perdón. Me reí y le dije que yo los había perdonado hacía tiempo y que gracias a esa "maldad" infantil hoy podía ser quien soy, reirme de mi misma, y porque no, ir a esa reunión de ex alumnos y reirme también de ellos. Reirme mucho y despues postearlo acá, para compartirlo con ustedes y que también puedan reirse.

domingo, septiembre 05, 2010

Andrés

Hoy pensaba porque a la menstruación le dicen ANDRES. Probablemente porque a alguien se le ocurrió rimar con el versito de que viene una vez por mes. Pero ¿Quien carajo es Andrés?. Quien quiera que sea, Andrés es un nombre demasiado dulce para ese momento.
Yo de ahora en más le voy a llamar EDGARDO o CARLOS, no sé, nombres más punks, acordes al estado de desequilibrio emocional en el que estoy cuando me viene.
Porque lo mio no son pequeños cambios de humor, sensibilidad o irritabilidad.
Yo ,cuando me viene, siento que soy KISS pisando a los pollitos en el escenario, me siento Acero Cali. - Para entendidos, Acero Cali , el día que peleó con el Ninja- .
O sea, quiero estar sola, dejame en paz, correte o sos boleta.

Y este mes cuando venga, va a venir con toda.  Porque septiembre es un mes crucial. Depende el año, y como te agarre, puede ser hermoso o puede ser una mierda.
No hace falta que aclare. Por los posts anteriores se darán cuenta que a mi me va más la segunda opción.
Ya me pone mal saber que en unos días voy a ver la clásica placa roja de CRONICA TV, con Palito Ortega de fondo , anunciando la llegada de la Primavera.
Pensamientos recurrentes que me vienen a la mente son:
"Se viene el calor".
"Me tengo que sacar el tapado, este invierno comí como una zarpada y está todo mal".
"Odio las musculosas. Son delatoras del paso de los años.Son mis enemigas".
"Cuando tenga que elegir la bikini,se pudre todo".

Ojeo las revistas y en todas veo ropa para nenas de 15. Mucho "Lolita", mucha florcita "estilo Liberty", mucho short, mucho estilo marinerita.
Me encanta , pero tengo casi 30, si me pongo eso y salgo a la calle me van a gritar: "Boluda, el casting para el Circo de Solei ya terminó" o cosas peores que no me atrevo a reproducir.
Me jode un toque saber que hay marcas que ya me están dejando afuera. Es como ver un cartel antes de entrar al local que dice "Solo para piernas sin celulitis y colas paradas : baqueteadas abstenerse".
Ponerse grande significa entre otras cosas que hay ropa que ya no te queda bien , chicos que no te quedan bien, horarios que no te quedan bien, entre otras cosas que tampoco te quedan bien.

El 21 de septiembre es el día D. Porque el día de la primavera ,es también el aniversario de casamiento de mis padres. Un día muy especial en donde mi madre no pierde oportunidad de recordarme que no tengo novio, que el pelo me queda mejor largo y que YA TENGO MI PRIMERA CANA - con una sonrisa como si hablara del  primer diente de leche -.
Pero si hay una imágen que me profundiza mis ganas de salir a  matar gente es ver que todos disfrutan mientras yo no paro de clavarme un IBUEVANOL atrás de otro. Parejas de novios por la calle, besándose, acariciandose el pelo, comprándose flores. Amigos disfrutando de la fauna y la flora. MATENSE. Yo estoy hinchada como un zeppelin, sin poder moverme, porque a EDGARO, ANDRES o como quieran llamarlo, se le ocurrió venir el día de la primavera.
Estoy INDISPUESTA ¿OK? .Mientras ustedes ven los peces en el Jardín Japonés , mientras se regalan chucherías con forma de corazón, mientras se prometen cosas que nunca van a cumplir , yo estoy IN DIS PUES TA.
Y lo más feliz que me pasará ese día es ir hasta MUMA`S en Palermo , comprar una caja de Cupcakes y esperar a que la próxima estación del amor , me encuentre más feliz. Pero sobre todo, ya ovulando.